La CPVO celebra su 30º aniversario con el IMIDA como entidad invitada en un evento que resalta el avance global en la protección vegetal europea
01·01·1970 | NOTICIA IMIDA
La Oficina Comunitaria de Variedades Vegetales (CPVO) conmemoró su 30º aniversario con un destacado evento celebrado el pasado jueves 24 de abril en la ciudad francesa de Angers.
Bajo el lema “30 Years of CPVO enabling Innovation for the Future of Plant Breeding”, la jornada reunió a altos representantes de la Unión Europea, la UPOV (Unión Internacional para la Protección de las Obtenciones Vegetales), así como de organizaciones clave del sector como CIOPORA, EUROSEEDS, ANOVE y otras entidades internacionales vinculadas al desarrollo y protección de variedades vegetales.
Durante el evento se analizaron los retos y oportunidades actuales en el ámbito de la obtención vegetal, destacando el papel fundamental de la innovación, la sostenibilidad y la propiedad intelectual en un contexto de creciente demanda alimentaria y cambio climático.
Uno de los momentos más relevantes fue la sesión dedicada a los “casos de éxito”, participaron empresas reconocidas como Sakata, XR-Crop y Beotanics, así como el Instituto Murciano de Investigación y Desarrollo Agrario y Medioambiental (IMIDA), invitado por su destacada labor en la mejora genética de la uva de mesa, en colaboración con la empresa murciana ITUM, especializada en variedades sin semilla. La sesión puso de relieve cómo la colaboración entre el sector público y el privado puede dar grandes resultados.
El investigador Manuel Tornel, en representación del IMIDA, presentó el modelo de investigación público-privada que ha permitido a los productores murcianos desarrollar sus propias variedades. Durante su intervención, Tornel destacó el importante avance en la obtención de nuevas variedades de uva de mesa, adaptadas a las demandas del mercado y a las condiciones climáticas de diferentes regiones del mundo. Estas variedades están teniendo una notable expansión internacional, cultivándose actualmente en los cinco continentes, lo que ha llevado al registro de derechos de obtentor (Plant Breeder Rights) en 11 países y superando ya las 140 protecciones concedidas.
Este logro pone de manifiesto el potencial de la investigación aplicada y la transferencia tecnológica como herramientas clave para mejorar la competitividad del sector agrícola europeo y promover modelos sostenibles de innovación en genética vegetal.